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Muí contenta con el trato recibido tanto a mi madre como trato a la familia! Agradecida a la directora Raquel por si preocupación e implicación en todas las necesidades y a la trabajadora social Mari carmen por su trato tan cercano y familiar en todo momento, apoyo y consejos. También nombrar a mari sales, Rosa, Carlos, Balbi, maría José (psicóloga) y Andrea de rehabilitación por toda la ayuda prestada durante todos estos años. Recomendado 100% tanto por estancias como por trato recibido.

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Cuando el 23 de noviembre mi hermana y yo llevábamos a mi madre a la residencia Solimar de Alzira íbamos con la preocupación de que, por pedirnos una tarifa bastante inferior a lo que nos pedían en nuestra ciudad, Ontinyent, parecía que íbamos a dejar a mi querida madre abandonada en una especie de cuchitril. Son momentos y decisiones que cuestan mucho de tomar. La diferencia en el precio era muy importante, de ahí la preocupación, y la voy a escribir para que quien lo lea pueda entender nuestros sentimientos y la labor tan magnifica que llevan a cabo en el centro Solimar Alzira. En Ontinyent nos pedían 2600€ al mes y al no poderlo pagar, pero estar al límite de nuestras fuerzas, nos planteamos ingresar a mi madre solo un mes para tomar un respiro porque necesitaba tantos cuidados y tanta atención que mi hermana y yo ya no podíamos más. Además, también teníamos que atender a mi padre. Y en plena desesperación contactamos con Mari Carmen, la trabajadora social de Solimar Alzira que nos ofreció una plaza de residencia por 1850€ al mes. El criterio económico suele ser el primero que barajamos a la hora de tomar decisiones y, en este caso, parecía que fuera importante. Por eso, la pena y la preocupación de que, al ser una diferencia para nosotras decisiva y que podíamos afrontar, fuéramos a dejar a mi madre en un lugar donde no la pudieran atender o por falta de personal o debido a unas instalaciones inadecuadas. Nada más lejos de la realidad. Después de una experiencia tan valiosa con todo el personal del centro, un trato tan afectuoso, digno y a la vez profesional, unas instalaciones nuevas y bien cuidadas, la higiene, espacios adecuados a cada situación de cada residente, en definitiva, el hogar donde mi querida madre ha dado sus últimos pasos en este mundo, solo tenemos palabras de agradecimiento, parabienes y satisfacción. Mi madre, que ya solo me conocía a mí, se sabía los nombres de sus auxiliares Sonia, Lis, Inma, porque eran su familia, su entorno. Tanto los médicos, las enfermeras, el enfermero, las auxiliares, la trabajadora social, la psicóloga, las administrativas, el administrativo, eran los referentes a los que se acogía mi madre en el final tan digno que le han dado. Solo tenemos parabienes, agradecimiento y satisfacción. Se podría decir que mi hermana y yo aún tenemos un asunto pendiente con la residencia: lamentamos no haber tenido más tiempo y más relación con el magnífico equipo humano que lleva a cabo su labor en Solimar Alzira. Recomendamos cien por cien esta residencia a quien este pensando en dejar a su ser querido en muy buenas manos como nos ocurrió a mi hermana y a mí. Muchísimas gracias.

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La familia de José Martínez Jordán quiere agradecer a la residencia Solimar el trato recibido durante los años que ha estado nuestro familiar allí.nHa estado siempre muy bien atendido y con un trato muy humano hasta sus últimos días.nMuchas gracias por todo.

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Nuestra abuela, tuvo la gran suerte de contar con los inmejorables cuidados de todo el personal.Son atentos ,cercanos y muy cariñosos . Si tenéis que llevar a algún familiar ,no dudéis que está residencia es la mejor.

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Solamente agradecer el esfuerzo y trato recibido los pocos días que estuvo mi padrenQue sepáis que vuestra labor es fundamental, para la gente que necesita vuestros servicios tanto humanos como administrativo.nGracias de corazón soys un equipo enorme..