Tomando decisiones importantes en la vida
En la vida, a menudo nos enfrentamos a dilemas que ponen a prueba nuestras capacidades y emociones. Estos momentos requieren de una reflexión profunda para tomar la mejor decisión posible.
El cuidado de un ser querido: una decisión transcendental
Encomendar el cuidado de un ser querido a otra persona o a una institución es una acción que no debe tomarse a la ligera. Esta decisión, sin duda, implica considerar una serie de factores importantes para garantizar el bienestar de la persona.
Tomar esta decisión puede ser desafiante, pero con la información adecuada y una reflexión profunda, es posible encontrar la mejor opción para el bienestar de tu ser querido.
Tomar la decisión sobre el grado de dependencia de un ser querido es fundamental, pero antes de actuar, hay varias preguntas que debes hacerte.
¿Tu ser querido quiere?
Este es el aspecto más importante a considerar. Tu adulto mayor tiene derecho a decidir si quiere o no estar en un lugar específico. Su decisión es el punto de partida, y no se le debe convencer, condicionar ni presionar. Al fin y al cabo, estamos hablando de su vida.
¿Tu ser querido puede?
Es crucial evaluar si tu adulto mayor cuenta con las condiciones físicas, intelectuales y sociales para estar en un lugar así. Lo que menos deseamos es que pase los días en un entorno que le resulte hostil.
¿La familia quiere y puede?
Esta decisión suele ser muy difícil y viene acompañada de todo tipo de sentimientos: culpa, tristeza, frustración e impotencia, entre otros. Poner las cosas en claro ayudará a que todos los involucrados estén en la misma sintonía.
Cuando se trata de decidir el mejor lugar para el cuidado de un ser querido, es crucial hacer las preguntas correctas. Aquí te presentamos una guía con 10 preguntas esenciales para los responsables de la residencia para ancianos.
1. ¿Cuáles son los costes, qué incluye y qué no incluye?
Este es el mejor punto de partida para evitar sorpresas. Es fundamental entender qué cubre la aportación mensual y qué no. Pregunta detalladamente sobre:
- Cuotas adicionales
- Frecuencia de incremento de tarifas
Además, es útil saber si la residencia proporciona elementos como camas, colchones, ropa de cama y otros accesorios necesarios para el cuidado del adulto mayor. Con esta información, podrás decidir si necesitas llevar algún artículo adicional.
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¿El presupuesto familiar lo permite?
Un aspecto igualmente importante es evaluar si la familia puede costear estos servicios. Puede que el paciente quiera y pueda pagar, pero ¿qué pasa si los costos superan el presupuesto familiar? Revisa si el seguro actual cubre estas necesidades. Tener un presupuesto claro será clave para tomar una decisión informada.
2. ¿Cuál es la trayectoria de la residencia y cuánta experiencia tienen?
Es natural que desees saber todo sobre el lugar donde tu ser querido se encontrará cuando no esté bajo tu cuidado. No dudes en preguntar sobre la atención médica general, la supervisión, la enfermería, la seguridad general y las actividades recreativas. Siempre es preferible elegir un lugar cercano a la casa de los familiares, ya que esto facilita las visitas y permite una rápida respuesta en caso de emergencia.
Es importante revisar si al contratar existe algún tipo de contrato que especifique las obligaciones de la institución y en qué aspectos se deslinda de responsabilidades. Reflexiona detenidamente sobre las necesidades de tu ser querido y verifica si el lugar ha tenido algún problema legal o infracciones.
Para ello, herramientas como rankingresidencias.com te van a ayudar a que puedas ver las reseñas de otros usuarios para que puedas tomar la decisión más acertada.
3. ¿Podemos conocer a fondo las instalaciones?
Un hogar para adultos mayores debe ser mucho más que un espacio con camas para descansar. La atención a todos los detalles es fundamental para garantizar el bienestar de los residentes.
Cuando evaluamos un centro para adultos mayores, es crucial considerar varios aspectos fundamentales para asegurar el bienestar y confort de nuestros seres queridos. Aquí te compartimos algunos puntos clave a tener en cuenta.
Elementos de Seguridad
Es vital verificar la presencia de rampas, extintores, accesos adecuados, escalones seguros, y cámaras de seguridad. Además, es esencial que tanto el personal como los residentes reciban capacitación sobre cómo actuar en caso de temblor o incendio. También, investiga el funcionamiento general del lugar y evalúa qué tan segura es la zona.
Inspección de Habitaciones
Si tienes la oportunidad, solicita permiso para ingresar a una habitación al azar. Esto te permitirá verificar aspectos importantes como la temperatura, el estado del baño y si tu adulto mayor estará en una habitación individual o compartida.
Interacción con los Residentes y el Entorno
Es fundamental distinguir entre las instalaciones y el ambiente del lugar. Pregunta sobre los horarios de visita, las restricciones y observa cómo el personal trata a los residentes. Evalúa si el trato es amigable y respetuoso, y si los llaman por su nombre.
Observación de los Residentes
Presta atención a la imagen de los residentes. ¿Luce felices? Observa e interactúa con ellos si es posible. Verifica si están limpios y vestidos cómodamente. Además, asegúrate de que el resto del mobiliario esté limpio y sea agradable.
Tomar en cuenta estos aspectos te ayudará a seleccionar el mejor lugar para tus seres queridos, garantizando su seguridad y bienestar.
4. ¿Qué tanto pueden cubrir las necesidades de mi ser querido?
Las necesidades de cada adulto mayor son únicas. Algunas personas pueden necesitar asistencia para levantarse de la cama, caminar, tomar sus medicamentos o incluso para ir al baño o ducharse. Es importante que hagas todas las preguntas necesarias para asegurarte de que su cuidado será adecuado.
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Algunos adultos mayores requieren de asistencia específica, como en casos de problemas del habla, demencia, fisioterapia y citas médicas. Estas necesidades deben ser atendidas con cuidado y profesionalismo.
5. ¿Cómo eligen a su personal?
Las instituciones dedicadas al cuidado de adultos mayores deben ser muy rigurosas con sus criterios de contratación. Es fundamental preguntar cómo reclutan a su personal, si investigan sus antecedentes y si realizan evaluaciones psicométricas para asegurar la idoneidad de los cuidadores.
Cuando visites las instalaciones, también es recomendable preguntar si hay personal específico asignado a ciertos residentes y cuál es el promedio de personal en relación con el número de adultos mayores atendidos.
6. ¿Cómo es el sistema de comidas y en qué consiste?
Para muchos adultos mayores, el tema de la alimentación requiere una atención especial. Es importante preguntar por el menú, pero sobre todo por los ingredientes que se utilizan. No dudes en visitar el comedor y la cocina para verificar de primera mano la higiene en la práctica.
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Investiga los horarios de servicio, cuántas comidas se ofrecen al día, si hay opciones de platillos y, en particular, si se adaptan a las dietas prescritas por los médicos para alguno o algunos residentes en particular. Por ejemplo, si tu adulto requiere ayuda para comer, pregunta si el lugar cuenta con personal capacitado para ello.
7. ¿Podemos tener un periodo a prueba?
Es fundamental no tomar una decisión definitiva sin antes realizar una demostración. Primero, observa cómo se siente tu adulto durante algún tiempo en el lugar y conoce su percepción.
Al elegir una residencia para adultos mayores, es fundamental considerar todos los aspectos que impactarán su bienestar y tranquilidad. Uno de los puntos clave es saber cuánto dura el periodo de prueba y qué sucede si se decide finalizarlo antes de tiempo. Es importante preguntar si están estipuladas devoluciones en esos casos para evitar sorpresas desagradables.
8. ¿Qué lineamientos tienen respecto a los objetos personales?
Es natural que tu ser querido quiera llevar consigo objetos personales a su nuevo hogar. Sin embargo, dado que la habitación ya está amueblada, es posible que haya ciertas condiciones sobre el uso de los espacios y la seguridad de estos objetos. Por eso, siempre es recomendable preguntar antes de tomar cualquier decisión.
En muchos casos, algunos objetos quedarán en el antiguo hogar. La clave es respetar todos los objetos del adulto, sin importar dónde se encuentre. Antes de decidir conservar, tirar, donar o vender cualquier cosa que le pertenezca, es vital platicarlo directamente con él para contar con su aprobación.
9. ¿Cuál es el protocolo que siguen para casos de emergencia?
En una residencia para adultos mayores, es esencial que tengan un protocolo claro sobre qué hacer en caso de emergencia relacionada con la salud de los residentes. Pregunta específicamente sobre los pasos que siguen y cómo aseguran la pronta atención y el bienestar de todos los residentes. Esto te dará tranquilidad y confianza en la elección de la residencia.
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10. ¿Qué hacer en caso de un accidente doméstico?
Es fundamental preguntar todo al respecto y, sobre todo, asegurarse de que el lugar cuente con personal médico disponible las 24 horas para atender este tipo de percances. Además, es crucial saber en qué momento se comunicarán con la familia.
Tomar la decisión adecuada
Decidir que un ser querido viva en una residencia debe ser una solución beneficiosa para todos. Como hemos mencionado, tomar una decisión tan importante requiere tiempo, información, reflexión y, sobre todo, consenso. Un trabajador social o el médico que actualmente atiende a tu adulto mayor puede ofrecer recomendaciones adicionales.
Recolección de información clave
Para tomar una decisión informada, es esencial formular las preguntas adecuadas. Recuerda, se trata del bienestar y la calidad de vida de tu ser querido.
- ¿El personal médico está disponible las 24 horas?
- ¿Cómo y cuándo se comunica la residencia con la familia en caso de emergencia?
- ¿Qué recomendaciones adicionales ofrece el trabajador social o el médico actual?